- una docena de alcachofas grandes
- 700 grs de almejas
- 150 grs de jamón serrano
- 1 puerro
- 2 cebolletas
- 3 dientes de ajo
- un vaso de vino blanco
- caldo de verduras
- una cucharadita de harina de maíz
- un manojito de perejil fresco
- unas hebras de azafrán
- sal y unos granos de pimienta
- aceite de oliva
-Dejamos las almejas en un cuenco con agua y sal para que suelten la tierra. Quitar los tallos y las hojas más duras a las alcachofas y se abren por la mitad a lo largo. Con ayuda de una cucharilla o la punta del cuchillo, retirar la pelusilla del interior y las vamos pasando a un cuenco con agua fría y un chorrito de limón.
-Se escurren bien y las cocemos al vapor procurando que no queden demasiado blandas. Las sacamos y se reservan en un plato. Enjuagar las almejas y las ponemos al fuego con un vasito de agua hasta que se abran.
-En una cazuela de barro calentar unas cucharadas de aceite de oliva y rehogar las cebolletas y la parte blanca del puerro cortadas en aros finos, a fuego suave. Cuando estén pochadas, incorporar los dientes de ajo muy picados, las hebras de azafrán y el jamón cortado en tiras finas. Sofreír unos minutos con cuidado de que no se quemen las cebolletas e incorporar entonces las alcachofas y unos granos de pimienta. Dar unas vueltas y bañar con el vino.
-Una vez evaporado el alcohol, agregar la harina de maíz desleída en medio vasito de caldo de verduras y el caldo de las almejas colado. Mezclar bien, tapar y cocer durante media hora a fuego medio, agitando de vez en cuando la cazuela. Unos minutos antes de acabar la cocción, incorporar las almejas y espolvorear el perejil picado.