- 250 grs de garbanzos
- 2 cebolletas
- 1 diente de ajo
- 2 zanahorias
- 1 puerro
- un litro de caldo de verduras
- unas hebras de azafrán
- 2 hojas de laurel
- sal y pimienta
- aceite de oliva
PARA LAS ALBÓNDIGAS :
- 150 grs de magro de cerdo picado
- 3 pimientos de Piquillo en conserva
- una yema
- 1 diente de ajo
- miga de pan mojada en leche
- perejil
-Después de tener los garbanzos en remojo durante toda la noche, se escurren bien y los pasamos a una olla con las hojas de laurel, una cebolleta cortada en gajos y las zanahorias enteras y limpias. Cubrimos con agua templada, agregamos sal y ponemos al fuego hasta que estén tiernos.
-Para la masa de las albóndigas, mezclar la carne con la miga de pan escurrida, los pimientos de Piquillo, el diente de ajo y un puñado de hojas de perejil, todo muy picado. Agregar la yema, una pizca de sal y pimienta, mezclamos bien y reservar en el frigorífico.
-Pelar y picar la otra cebolleta y la parte blanca del puerro y rehogarlos en una sartén, a fuego suave, hasta que estén blanditos. Agregar las hebras de azafrán y una pizca de sal, damos unas vueltas y apartamos.
-Con la masa de las albóndigas, vamos formando bolitas pequeñas. Calentamos el caldo de verduras y cuando comience a hervir, se van echando dentro y a medida que estén cocidas se sacan a un plato.
-Escurrir el agua de los garbanzos. Retirar las hojas de laurel y trocear las zanahorias. Incorporar el sofrito de cebolleta y puerro, las albóndigas y el caldo colado. Mezclar suavemente y cuando arranque a hervir, bajamos el fuego y dejamos cocer todo junto quince minutos más.