- 4 patatas medianas
- 2 cebolletas
- un vaso pequeño de leche
- 2 latas de atún al natural
- 2 cucharadas de aceitunas rellenas de pimiento
- 1 huevo
- 1 huevo cocido
- una tacita de salsa de tomate casera
- 2 cucharadas de mantequilla
- unas hojas de perejil fresco
-Enjuagar las patatas sin pelar, frotarlas con un cepillo bajo el grifo y cocerlas al vapor hasta que estén tiernas. Una vez templadas, las pelamos, se trituran con la mantequilla y vamos agregando la leche tibia, poco a poco para no aligerarlo mucho. Debe quedar espeso. Para que el puré quede perfecto, no triturar nunca con la batidora así evitaremos que quede gomoso. Hay que hacerlo con pasapurés o machacándolas directamente en un cuenco.
-En una cucharada de aceite de oliva rehogamos a fuego muy suave las cebolletas cortadas en juliana muy fina. Tapamos y cuando estén blanditas, apartamos del fuego, se pasan a un bol y dejamos enfriar.
-Escurrimos el atún lo desmenuzamos y se mezcla con las cebolletas, agregar las aceitunas y el huevo cocido cortados en rodajas finitas, dos o tres cucharadas de salsa de tomate, un puñado de hojas de perejil muy picadas y mezclar bien.
-Engrasar una fuente de horno honda con unas gotas de aceite de oliva. Cubrir el fondo con la mitad del puré y extenderlo bien con ayuda de una espátula. Repartimos encima la mezcla de atún y “tapamos” con el resto del puré.
-Batir el otro huevo como para tortilla y añadirle una cucharada de tomate. Nivelar con un cuchillo la superficie del pastel y volcar encima el huevo batido, extendiéndolo bien. Hornear durante veinte minutos a 180 grados y cuando vayamos a comer encendemos el grill a máxima potencia y gratinamos hasta que quede doradito.